Cuando me enfrento a un proyecto, debo admitir que no siempre empiezo con un Moodboard como se supone que debo hacerlo. Supongo que cada uno tiene su propio proceso y yo compartiré el mío contigo.

Tener un moodboard es genial, pero a veces me parece mucho trabajo innecesario cuando ya tengo toda la información en la cabeza y solo necesito plasmarla en un dibujo para empezar a bordar. Por suerte, tengo una amiga artista súper talentosa que entiende perfectamente mis ideas -muchas veces desordenadas y alocadas, obviamente!- y hace los dibujos más increíbles con ellas. Básicamente, la mayoría de las veces empiezo con un concepto y una imagen que lo represente.

Una vez que tengo eso claro elijo la paleta de colores y materiales de lo que tengo en stock. Al vivir en Lima, Perú, el tema de los materiales es un poco complejo porque no hay muchos lugares para comprar materiales de buena calidad; por lo que a lo largo de los años he encontrado muchas tiendas en línea donde puedo comprar diferentes cosas, además, cada vez que tengo la oportunidad de viajar al extranjero busco cualquier cosa que, con suerte, podría ser útil en el futuro, así que tengo una cantidad respetable de materiales para elegir.

Con la paleta de colores y materiales seleccionados lo que hago es escribir notas en el diseño señalando los puntos y materiales que me gustaría usar en cada parte imaginando el resultado; por supuesto, esto no siempre sale como estaba planeado y hago cambios en el camino, pero estas notas iniciales me dan una idea bastante clara del resultado general que puedo esperar. Al hacer estas notas tomo en consideración el equilibrio que necesito darle a la pieza para que cada material se complemente con el otro y deje que cada uno brille por sí solo. Darle espacio al diseño para que respire es tan importante como colocar el material correcto en el espacio preciso. Por eso es tan importante elegir una tela de buena calidad para tu bordado, quieres que la base sea tan bonita como su bordado y le haga justicia a todo tu arduo trabajo.

Combinar materiales brillantes con mate es una buena idea, y usar algunos acentos también, como cristales por ejemplo. El uso del color para realzar las formas es una manera inteligente de sacar el máximo partido a tu diseño. El tamaño de los materiales es muy importante para que tu bordado se vea bonito y con buen acabado; yo principalmente trabajo con mostacillas 15/0 y 11/0, creo que son más delicadas y hacen que cualquier bordado se vea elegante. Como regla general, debes comprar los mejores materiales que puedas pagar, recuerda siempre que la parte más costosa de tu bordado es el tiempo y esfuerzo que pondrás en hacerlo.

A la hora de elegir las técnicas siempre tengo en cuenta el movimiento del diseño para no alterar el flujo natural de las líneas. Respetar la dirección de las puntadas en el diseño marcará la diferencia entre que tu bordado parezca profesional o amateur, no olvides este importante consejo.

Después de todo, de eso se trata Broderie D'Art, de encontrar el equilibrio entre todas las texturas, colores y volumen de una pieza. Como todo en la vida se necesita práctica, simplemente anímate! Aprende algo nuevo con cada proyecto y diviértete en el proceso.

¿Cómo te sientes al diseñar tus bordados? ¿Te siente cómodo haciéndolo o todavía sientes que necesitas orientación para lograr lo que esperas? Déjame saber en los comentarios si esta información fue útil, si tienes alguna duda o si hay algo adicional que crees que debería considerar. Me encantaría leerte. XOXO